Jaguar: la llave de pulsera
Pese a ello, consiguió nadar hasta la orilla, hecho que, sin lugar a dudas, le salvó la vida. El otro pasajero que viajaba con él tuvo menos suerte y murió en el accidente. Supuestamente iban a una velocidad de 40 nudos (unos 70 km/h), siendo esta velocidad más alta de la permitida.